Hay un lugar en Valladolid, llamado Fompedraza. Un lugar donde la magia se cuece a fuego lento y los viñedos son espectadores de los que se sientan en primera fila para contemplar el espectáculo.

 

Fompedraza está situado a 895 metros sobre el nivel del mar, en una de las cotas más altas de toda la D.O Ribera del Duero donde cielo y tierra se rozan para crear un enclave único en la región. No es de extrañar, que tras el éxito hayan querido ampliar y hayan apostado por abrir también una bodega en Villafranca del Duero, cuna por excelencia del vino verdejo que permite producir su primer vino blanco dentro de la colección.

 

En Kabanyal, tenemos una pequeña variedad de sus vinos siempre fríos para ser vertidos en vuestras copas y acompañar los mejores momentos en torno a la mesa.

 

Uno de ellos es el Celeste Roble, un tinto que hará las delicias de los amantes de corazón del vino. Ideal para acompañar con carne y disfrutar de su potente sabor.

 

También tenemos Celeste Crianza, un vino tempranillo muy afrutado que se convierte en la pareja perfecta para maridar junto con un plato de caza o asados.

 

Y por último, el Celeste Verdejo con unas notas vegetales que le permiten ser el vino más fresco y ligero de nuestra pequeña variedad en carta.

 

Dicen que las conexiones nacen de la magia, y Celeste es el claro reflejo de ello.

 

 

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